Los andamios de fachada son una estructura de soporte que se utiliza para la realización de trabajos de construcción y mantenimiento en la fachada de un edificio. Se trata de una solución ideal para trabajos en altura, ya que proporcionan un gran nivel de seguridad tanto para el operario como para el resto de personas que se encuentren en el interior del edificio.
Los andamios de fachada se componen principalmente de una serie de postes verticales y horizontales interconectados entre sí. Esta estructura se suele completar con una plataforma sobre la que el operario puede realizar su trabajo de forma segura.
Los andamios multidireccionales son una excelente opción para aquellos que necesitan una gran cantidad de espacio para trabajar.
Estos andamios ofrecen muchas ventajas sobre otros tipos de andamios, como una mayor capacidad de carga y una mayor estabilidad.
También son muy fáciles de armar y desarmar, lo que los hace perfectos para el trabajo en lugares donde se necesita un andamio por un tiempo limitado.
Los andamios europeos de fachada, también conocidos como andamios de frente o andamios de enlace, son una forma especial de andamio rígido que se usa a menudo para la construcción y el mantenimiento de edificios.
Como su nombre indica, estos andamios están diseñados para ser apoyados contra la fachada de un edificio, y generalmente se componen de una serie de cuadros verticales de metal o madera que se apilan unos sobre otros.
En muchos casos, los andamios europeos de fachada se pueden anclar al edificio utilizando abrazaderas o pernos, y esto hace que sean más estables y seguros que otros tipos de andamios.
